La segunda entrega corresponde a una historia genial creada por Roxana donde se habla de la historia de Quitral y el choque cultural mediante una leyenda mapuche, los invito a leerla. Felicitaciones Roxana
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EL SUEÑO DE QUITRAL
Cuenta la leyenda que hace muchos, muchos años poblaban la tierra del sur de Chile diversos pueblos agrupados en tribus. Cada pueblo poseía sus propias características y costumbres, sin embargo compartían la más importante de todas; el respeto por la paz.
Así, cada vez que había un desacuerdo entre las personas de distintos pueblos, los problemas eran presentados a su representante (generalmente el miembro más anciano de la tribu) para que los discutiera con el “Encargado de asuntos” del otro pueblo y en conjunto buscaran la mejor solución.
Sucedió que un día Quitral, la nieta del anciano de una tribu tuvo un sueño que éste no pudo interpretar. Aquel sueño tenía a la niña muy intranquila, pues en su interior sentía que su significado implicaba grandes cambios para el futuro de su gente.
No se sabe cuanto tiempo pasó hasta que todo el pueblo hubo escuchado el sueño de la niña, y al no poder darle sentido, se contagió de la intranquilidad de Quitral. El caso es, que ante tal situación, el anciano decidió que lo mejor era buscar consejo con los ancianos de los pueblos cercanos.
Cuenta la leyenda que el anciano y su nieta anduvieron deambulando durante una semana por las tribus cercanas en busca de respuesta, por lo que pronto la noticia del perturbador sueño fue conocido en toda la región.
Fue entonces que los más importantes miembros de todas las comunidades hasta donde la noticia había llegado decidieron reunirse y citar al anciano y su nieta para entre todos analizar el sueño.
Comenzó entonces la niña a relatar y dijo: “Estaba yo tejiendo una manta en el telar cuando, al levantar la vista, veo aparecer en el valle una gran polvareda negra. La enorme nube se separó en cuatro más pequeñas que avanzaron hacia cada uno de los cuatro puntos cardinales de la tierra. Seguí mirando el horizonte hasta que las cuatro nubes de polvo negro volvieron arrastrando mantas de todos los colores y tamaños.
Cuando la nube se hubo fundido en una sola apareció una gran figura, mitad humana mitad hombre, que me extendió una vasija desde donde debía beber un amargo líquido. Una vez que hube bebido el primer sorbo intenté hablar, pero ya no pude entender lo que decía, pues mi lengua había cambiado para hacerse comprensible al forastero”.
Apenas hubo terminado el relato se produjo un gran silencio entre los presentes, a través del cual se podía oír a lo lejos un sonido nunca antes percibido; una especie de golpeteo de los dedos sobre el Kultrún. …..
Quitral = Fuego
Cuento Mapuche, Roxana Silva Aguilera.
Cuenta la leyenda que hace muchos, muchos años poblaban la tierra del sur de Chile diversos pueblos agrupados en tribus. Cada pueblo poseía sus propias características y costumbres, sin embargo compartían la más importante de todas; el respeto por la paz.
Así, cada vez que había un desacuerdo entre las personas de distintos pueblos, los problemas eran presentados a su representante (generalmente el miembro más anciano de la tribu) para que los discutiera con el “Encargado de asuntos” del otro pueblo y en conjunto buscaran la mejor solución.
Sucedió que un día Quitral, la nieta del anciano de una tribu tuvo un sueño que éste no pudo interpretar. Aquel sueño tenía a la niña muy intranquila, pues en su interior sentía que su significado implicaba grandes cambios para el futuro de su gente.
No se sabe cuanto tiempo pasó hasta que todo el pueblo hubo escuchado el sueño de la niña, y al no poder darle sentido, se contagió de la intranquilidad de Quitral. El caso es, que ante tal situación, el anciano decidió que lo mejor era buscar consejo con los ancianos de los pueblos cercanos.
Cuenta la leyenda que el anciano y su nieta anduvieron deambulando durante una semana por las tribus cercanas en busca de respuesta, por lo que pronto la noticia del perturbador sueño fue conocido en toda la región.
Fue entonces que los más importantes miembros de todas las comunidades hasta donde la noticia había llegado decidieron reunirse y citar al anciano y su nieta para entre todos analizar el sueño.
Comenzó entonces la niña a relatar y dijo: “Estaba yo tejiendo una manta en el telar cuando, al levantar la vista, veo aparecer en el valle una gran polvareda negra. La enorme nube se separó en cuatro más pequeñas que avanzaron hacia cada uno de los cuatro puntos cardinales de la tierra. Seguí mirando el horizonte hasta que las cuatro nubes de polvo negro volvieron arrastrando mantas de todos los colores y tamaños.
Cuando la nube se hubo fundido en una sola apareció una gran figura, mitad humana mitad hombre, que me extendió una vasija desde donde debía beber un amargo líquido. Una vez que hube bebido el primer sorbo intenté hablar, pero ya no pude entender lo que decía, pues mi lengua había cambiado para hacerse comprensible al forastero”.
Apenas hubo terminado el relato se produjo un gran silencio entre los presentes, a través del cual se podía oír a lo lejos un sonido nunca antes percibido; una especie de golpeteo de los dedos sobre el Kultrún. …..
Quitral = Fuego
Cuento Mapuche, Roxana Silva Aguilera.
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